Historia de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte

Sede de la CATT. Jujuy 1072/74 CABA

La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) se organizó durante 1961, momento en que se desarrollaba un proceso de conflictos sindicales por el deterioro económico y político, reprimidos duramente por el gobierno del presidente Arturo Frondizi, y por la constitución de la Comisión de los 20, integrada por los “independientes” y las “62”, que asumirían una conducción provisoria de la CGT.

El plan de ajuste económico había sido recomendado por el Fondo Monetario y el Banco Mundial, y la gestión presidencial, cada vez más impopular, se sostenía por la aplicación creciente del Plan Conintes (1).

La política del gobierno también afectaba concretamente a los trabajadores del transporte, los cuales estaban amenazados por la aplicación de Plan Larkin (2), llamado “Transportes Argentinos, Plan de Largo Plazo”, desarrollado por el Banco Mundial.

Antes esta situación, los días 7, 8 y 9 de agosto se realizó en el Teatro Empire de La Fraternidad el congreso constitutivo de la naciente Confederación.  Con la presidencia del compañero  Arturo Scipioni, presidente de la Unión Ferroviaria (UF), y luego de constatada por la Comisión de Poderes las credenciales de los delegados, se constituyó con la participación de los siguientes sindicatos: UF, Unión Tranviarios Automotor (UTA), La Fraternidad, Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), Sindicato de Changadores Ferroviarios, Sindicato de Choferes Particulares, Sindicato Choferes de Camiones y Afines, y la Asociación Personal Aeronáutico (APA).

Una vez constituido el Congreso, se leyó el telegrama de adhesión de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF, por sus siglas en ingles), y se designó una comisión para que visite la CGT e invite al secretariado a presenciar las deliberaciones. Además, se redactaron comunicados de prensa que se manifestaron en contra de la privatización del transporte y la Ley de Defensa de la Democracia (3).

Asimismo, se aprobó el Estatuto de la Confederación y se resolvió emitir un comunicado de prensa solidario con todas las organizaciones gremiales en conflicto “por reivindicaciones sociales y económicas”, y al cabo de dos jornadas de deliberaciones se designo  el Secretariado de la CATT, que quedo integrado por los compañeros Antonio Scipioni (UF) y Manuel Carulias (UTA), como Secretarios generales, Oscar Guiet  (La Fraternidad), como Secretario de organización, José Arranz (SOMU), Secretario administrativo, y Manuel Campos (Sindicato Changadores Ferroviarios), que asumió como Tesorero. Como vocales titulares fueron designados Jorge Cabrera (APA), Manuel Cortez (Sindicato Chóferes Camiones y Afines), Norbel Grisofoli (UF), y Amador Gutiérrez (UTA), y como vocales suplentes quedaron Abel Oscar Cuervo (Sindicato Chóferes Particulares), Celman Fidel (SOMU), Nicanor Rodríguez (La Fraternidad), y Alberto Sanvitale (Sindicato Changadores Ferroviarios). Por último, los revisores de cuentas titulares fueron Humberto Bravetti (La Fraternidad), Antonio Botta (UTA) y Roberto Martin Gómez (SOMU); y los suplentes, José Colombini (Sindicato Choferes Particulares) y Ernesto Lores (APA).

Los compañeros Alberto Riva (UF) y Alberto Román (SOMU) firmaron el Acta del Congreso, rubricando la constitución de la naciente Confederación, acompañado de un caluroso aplauso de todos los presentes en el Teatro Empire.

Finalmente, el compañero Antonio Scipioni ratificó el objetivo de la CATT de encontrar soluciones a las dificultades de los gremios del transporte: “(…) Sabemos que si bien el camino es arduo y difícil, no se escatimara esfuerzos para tratar de solucionarlos, de manera de hallar un mejoramiento total para los trabajadores del transporte”, afirmó. También agradeció por la ratificación de la confianza, y procedió a cerrar las deliberaciones de ese día histórico del 9 de agosto de 1961 con la entonación de las estrofas del Himno Nacional, expresión de la voluntad asociativa de los trabajadores del transporte organizados en Unidad y Solidaridad.

En 1978, a dos años de iniciarse la última dictadura cívico-militar de nuestro país, el entonces gobierno de facto suspendió la personería gremial de la CATT. Recién en el año 2003, con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia de la Nación, la CATT recuperó su personería jurídica y gremial, asumiendo Hugo Moyano, titular de Camioneros, como Secretaria general de la Confederación.

En el año 2008, Omar Viviani (Peones de Taxi) asumió como Secretario general de la CATT, cargo que ocupó hasta el 2012. En ese año, Juan Carlos Schmid, titular de Dragado y Balizamiento, fue elegido como nuevo Secretario general de la Confederación. La elección, que se llevó a cabo en la sede ubicada en Jujuy 1068, contó con la participación de 24 de los 38 gremios de transporte, que representan a 72 delegados congresales.

El 27 de mayo del 2016, la CATT realizó su Congreso General Ordinario en el Teatro Empire del gremio La Fraternidad, donde Schmid fue reelecto en la conducción por cuatro años más. Al Congreso asistieron 85 Delegados congresales, en representación de los 30 sindicatos del transporte que conforman actualmente la CATT.

Notas

(1) Plan Conintes. Conmoción Interna del Estado fue el régimen represivo concretado durante la presidencia de Arturo Frondizi, que tenía como finalidad reprimir las luchas obreras, con la intervención de las fuerzas armadas. Prohibía las huelgas y protestas de los trabajadores, perseguía a los militantes y dirigentes gremiales y los juzgaba por tribunales militares.

(2) Plan Larkin. Un plan de racionalización del sistema de transporte argentino, realizado entre 1959 y 1962 a instancias del Banco Mundial, bajo la dirección del ingeniero y militar estadounidense teniente general Thomas Larkin, para reorganizar los modos de transporte, despedir trabajadores, desregular condiciones de trabajo y reducir la capacidad de negociación de los sindicatos.

(3) Ley de Defensa de la democracia. Un proyecto para sumar un nuevo instrumento legal al sistema represivo durante el gobierno de Arturo Frondizi, que permitiese encuadrar dentro de la lucha contra “el comunismo y el totalitarismo” un amplio abanico de actividades políticas y sindicales.